El día ha despertado bien temprano para nosotros (5:45am). La gente en Moorea ya había comenzado su jornada de viernes, y los niños esperaban a las 6:30 de la mañana el autobús que los lleva al colegio.Aunque no nos ha gustado nada el madrugón, el fresco de la mañana nos ha despejado camino del puerto, donde nos esperaba el barco con destino a Tahiti.
Hemos subido al
ferry para pasar el día en la isla vecina y hermana mayor de Moorea. Además de recorrer la isla en la jornada de hoy, estábamos decididos a despejar una incognita que teníamos en mente desde que comenzamos el viaje, modificar nuestro billete "tarifa Vuelta al Mundo", y así pasar por India antes de llegar a Madrid a finales de noviembre. Ni cortos ni perezosos, hemos ajustado las fechas para pasar los últimos 12 días en ese país "tan amado y tan odiado" para nosotros y comprar un Tokio-Delhi para el 13 de noviembre y visitar en Agra el famoso "Taj Mahal" y de allí pasar unos días en Calcuta para encontrarnos con Carolo (Blog: www.merenguemilengue.blogspot.com) y los chic@s de New Light. Tras realizar estos trámites hemos alquilado un coche para recorrer la isla (una opción cara pero la más recomendable cuando se dispone de poco tiempo, ya que el transporte de autobuses tanto en Tahití como en Moorea es deficitario y sin un horario concreto). Comenzando desde Papeete, y escapando del gran tráfico que hay en esta ciudad hemos comenzado recorriendo el sur de la isla donde a pocos kilómetros está el Museo de Tahití (Comuna Punaauia, costa oeste en el PK14,5), y seguido en el km 22,5 el
Marae Arahurahu , un templo al aire libre donde los antiguos polinesios adoraban a sus dioses, donde se ejercía la justicia, se practicaban los sacrificios, se gobernaba, donde se decidía y se reunían para rezar, cantar alabanzas y bailar, antes de las recolecciones, los nacimientos, y antes de ir a la guerra para obtener la bendición de los dioses.
¿Os recuerda en cierta forma a los Moáis y las plataformas donde se asentaban (Aru) en Isla de Pascua?
Siguiendo la carretera que bordea la isla te encuentras con varias playas públicas donde nosotros hemos hecho una parada para comer y refrescarnos, antes de encontrarnos con la Casa Museo de Gauguin , abierto todos los días de 9 am hasta las 5 pm.
Un día se queda corto para visitar esta pequeña-gran isla, lo recomendable es como mínimo dos días para llegar a las playas de Tehaupo o Vairao, en Tahiti Iti, acercarse a las tres cascadas Faarumai en el norte de la isla o al faro de la Punta de Venus, la bahía a la cuál llegaron la mayoría de los exploradores a finales del siglo XVIII.
Antes de embarcar por la tarde para regresar a casa, hemos querido dejar reservada una habitación cerca del aeropuerto para pasar la última noche en Tahiti, antes de tomar el vuelo de nuestra próxima escala: Nueva Zelanda.
Nos vamos para Moorea a pasar el fin de semana...¡MADRE MÍA QUE ESTRÉS...¡.
PD: ¡Carolín, qué vamos a verte¡, un beso.