Un poco de historia... Cuando arribaron a la isla los primeros occidentales (hombre blanco) a finales de S. XVIII, bautizaron el lugar como "la isla de la felicidad", porque observaron sus nobles costumbres, su organización social, siendo la familia la base de toda estructura, sus danzas y ritos basados en creencias ancestrales y en definitiva, su alegre forma de vida. Nos contaba hace unos días, un viejo artesano local mientras trabajaba la madera; que Moorea y gran parte de las islas polinesias han sido víctimas de su propia historia "desde la llegada del hombre blanco" y es que el "Desarrollo" traído desde la metrópoli ha sido "un viaje con más naúfragos que navegantes...". (Nos decía el artesano): - No queremos importar enfermedades del Mundo Occidental; no queremos trabajar jornadas de 10 horas para ninguna firma multinacional francesa; no conocemos, de momento, qué es el "stress o la depresión"; no queremos hipotecar nuestros recursos naturales y queremos seguir con nuestras costumbres y tradiciones... La historia siempre se repite, todos los imperios económicos se han creído con la verdad absoluta para someter a otros pueblos, en aras del progreso y el bienestar material. Así ha pasado, por ejemplo, durante los tres siglos de sometimiento político, religioso y militar del imperialismo español en América Latina a partir del S. XV; así ha pasado con la conquista de todos los mercados mundiales del imperialismo británico a partir de la Revolución industrial del S. XIX; así ha pasado con el deseo insaciable de conquistas del imperialismo soviético o así ha pasado y está pasando en la actualidad con el moderno imperialismo norteamericano y todas sus estructuras políticas y financieras. "porque no es oro todo lo que reluce en este paraíso de felicidad..." Paz y bien.